Cuando trabajas en una clínica de pequeños animales tienes muchas clases de clientes.
Los hay que se vuelcan al 100% en su mascota, los que lo hacen al 1%, los términos medios, los que saben mucho sobre perros, los que creen que lo saben, los que no saben nada...los que tienen perros grandes, pequeños y/o medianos, los que tienen gatos, tortugas, peces, cobayas... Infinidad de perfiles, cada cual distinto. Y ninguno es mejor o peor que el otro, son todos distintos y especiales en cada aspecto.
Los animales, los perros en el caso concreto que os voy a comentar, también son distintos. Cómo ya hemos dicho, para empezar tienen distintos tamaños (a veces cambiando de raza, y a veces en una misma raza, véase el Schnauzer gigante, mediano y miniatura). No obstante esto no significa que deban tener un trato distinto.
He podido comprobar que la mayoría de los problemas en los perros empiezan por sus paseos, o mejor dicho por su falta de paseo.
Problemas de riñón, problemas de socialización, problemas de comportamiento, problemas de obesidad,...
A pesar de llevar muchos años con los perros como animales de compañía, no debemos olvidar que por encima de la relación que tenemos con ellos, se encuentra la necesidad del animal en sí.
Escucho continuamente cosas cómo:
- No hace falta que salga, si ya tiene un jardín. Esto es a medias correcto. Es verdad que el animal va a poder correr más a sus anchas en el jardín, podrá hacer las primeras necesidades del día si nuestra rutina no nos permite ir a la vez que la de nuestra mascota, y podrá gozar de un espacio mucho mayor para jugar. Pero esto no exime a los dueños de sacarle las mismas veces que a un animal que no tenga un jardín a su disposición. Los perros deben hacer recorridos nuevos, oler cosas nuevas, jugar con otros perros... Por muy grande que sea nuestra casa, si estamos todo el día en ella (durante varios días seguidos), nosotros también nos volvemos locos, ¿verdad?
- Es pequeño, no tiene que salir tanto. Los perros pequeños, creo que a veces lamentan haber nacido siendo pequeños. Se piensa que por su tamaño son perros que no necesitan caminar, ni jugar, ni conocer a otros animales. Les humanizamos más que a ninguno, pensando que quieren estar a nuestro lado, encima de nosotros, en nuestro bolso, en nuestra casa, que pasan frío, que los perros grandes les van a hacer daño, les ponemos un empapador en casa, o una caja con arena como si fueran gatos (ojo, los gatos aunque viviendo en ciudad no tenga la oportunidad de salir, también necesitan hacer ejercicio cada día)... Son perros, y ellos se entienden entre ellos. Son perros y no por ser pequeños deben caminar menos. Una persona de dos metros, tiene la misma necesidad de hacer ejercicio que una de metro y medio, ¿verdad?
- No tengo mucho tiempo, le saco varias veces pero poco. Todos tenemos una vida, claro. Pero hemos decidido compartirla con un animal que depende de nosotros. Salir diez veces cinco minutos cada vez, no les sirve de nada. Es mejor que le saques un largo paseo durante la mañana, o la noche (o en el horario que mejor te venga pasear durante una hora), y luego varios cortos.
Los perros, sean de la raza que sean y del tamaño que sean, necesitan ,en condiciones ideales, pasear un total de dos horas diarias. Se recomienda que mínimo hagan ejercicio 30 minutos seguidos en algún momento del día. De esta forma van a ser capaces de liberar todo el estrés, de cansarse física y mentalmente.
Puede que suene difícil, a veces imposible poder cumplir con los tres a cinco paseos diarios recomendados, y con los 30 minutos de ejercicio necesarios para tu mascota, pero te aseguro que notarás un cambio. Los paseos dejarán de ser tirones de correa, en casa estará más relajado. Evitarás que tenga que contener la orina y así desarrollar alteraciones renales, evitarás que coja esos kilos demás, causantes de la muerte y las alteraciones cardíacas en la gran mayoría de los perros.
Pasear con tu mascota no debe ser una obligación (que lo es, porque para el animal es vital), si no que los paseos deben de ser un momento para relajarte tu también, un momento para disfrutar con tu mejor amigo, un momento para vivir.
No sólo van a ser positivos para ellos, para nosotros también suponen una ayuda a nuestro corazón, a nuestro estrés, a aumentar nuestro ejercicio diario, nos obliga a conocer a otra gente (aunque a veces nos neguemos)...
Los paseos nos van a dejar reforzar el vínculo con nuestra mascota.
Es mejor un paseo de calidad que muchos pequeños. Intenta querer pasear a tu perro, tanto el cómo tú notaréis el cambio.
A veces nos viene bien a nosotros, dejarnos llevar por nuestro lado más perro.